Amado Elorriaga realizó una degustación de vinos en La Mestiza el jueves 15.

El vino es poesía embotellada!. (Robert Louis Stevenson)

Realmente merece describir la hermosa velada compartida con amantes del buen vino, donde la estrella de la noche fue la Bodega Cicchitti, con el excelente maridaje preparado por la casa anfitriona, La Mestiza, donde se pudo apreciar en los platos el buen gusto por la cocina de Coqui y su gente.

Amado Elorriaga, el Sr. Del Vino, recibió a sus invitados con un exquisito Chardonnay que se acompañó con diferentes quesos, tomates confitados, aceitunas negras y hojas verdes.

La entrada siguió con el “Chardonay de Cicchitti” maridado en esta oportunidad con polenta con verduras caramelizadas y mollejas al vino blanco.

 El Plato principal, osobuco braseado con puré de batata y el vino acompañante fue un sabroso “Sangiovese de Cicchitti”.

De postre, brownie con helado de crema americana y frutos rojos, coronado por un riquísimo Espumante “Soigne Brut Rosé de Cicchitti”.

En cada entrada de distintos platos no faltó la palabra de Amado, dando maestría y brindado pasión al dar a conocer las propiedades y características de cada bebida degustada e invitando a los adeptos de estos maravillosos vinos y espumantes a disfrutar de la noche, que todos los presentes aceptaron gustosamente. 

¡Por supuesto agradecer esta invitación a Amado, donde con el siempre se aprende, se comparte y esperando poder tener más lindos momentos con compañeros de tan linda mesa, gracias Melina, María y Nico! Y como dice el nuevo grupo…El vino hace amigos!!! Chin chin…

Si alguien está interesado en realizar alguna degustación privada, pueden comunicarse con Amado al celular 2926-495855 -  Dirección, Conturbi 854 de Coronel Suárez.

Jorge Luis Borges y su Soneto del Vino.

«¿En qué reino, en qué siglo, bajo qué silenciosa
conjunción de los astros, en qué secreto día
que el mármol no ha salvado, surgió la valerosa
y singular idea de inventar la alegría?

Con otoños de oro la inventaron. El vino
fluye rojo a lo largo de las generaciones
como el río del tiempo y en el arduo camino
nos prodiga su música, su fuego y sus leones.

En la noche del júbilo o en la jornada adversa
exalta la alegría o mitiga el espanto
y el ditirambo nuevo que este día le canto

otrora lo cantaron el árabe y el persa.
Vino, enséñame el arte de ver mi propia historia
como si ésta ya fuera ceniza en la memoria.»